La Comisión Deontológica del ICOMEM analiza los aspectos éticos y deontológicos de la asistencia telemática a los pacientes

30 jun 2022

• En el informe emitido por la Comisión Deontológica se analiza el potencial y las limitaciones de la consulta telemática

• La Comisión recuerda la necesidad de adquirir la evidencia científica y adoptar una actitud de prudencia antes de su implementación rutinaria

La Comisión Deontológica del ICOMEM analiza los aspectos éticos y deontológicos de la asistencia telemática a los pacientes
La Comisión Deontológica del ICOMEM analiza los aspectos éticos y deontológicos de la asistencia telemática a los pacientes
La Comisión Deontológica del Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Madrid (ICOMEM) continúa con el foro de discusión sobre ética y deontología en la profesión médica de hoy, “En Código Médico”, a través de un ciclo de seis jornadas divulgativas y de debate en las que se abordan temas de máxima actualidad e interés para la profesión médica.
 
Tras la celebración de la tercera de estas jornadas con la participación de varios médicos de distintos hospitales de la Comunidad de Madrid, la Comisión Deontológica ha elaborado un documento sobre los aspectos éticos y deontológicos de la atención telemática a los pacientes y la telemedicina.
 
Considera que la aplicación de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación en el ámbito de la medicina trae nuevas posibilidades, muchas aún por desarrollar, que han experimentado un importante impulso con la pandemia. 
 
El recurso de la telemedicina se aceleró gracias a las nuevas tecnologías y a la imposibilidad de salir de casa durante el confinamiento. La tendencia se mantuvo incluso después del fin del confinamiento, que en muchos casos ha sustituido a la consulta presencial clásica. Hoy, alejados del contexto de confinamiento, se sigue produciendo de forma muy frecuente y, por esta razón, el informe se centra particularmente en la asistencia telemática a los pacientes:
 
1.- Las distintas plataformas de contacto telemático son una herramienta extraordinariamente útil en algunas ocasiones. Sin embargo, también hay que ser conscientes de las limitaciones que presentan que se refieren particularmente a la limitación de una anamnesis y exploración física en las que el cuerpo enfermo sea adecuadamente valorado.
 
2.- La propia naturaleza de la asistencia sanitaria gira en torno a la enfermedad, que es en sí un fenómeno corporal y que se produce propiamente entre personas, cuya comunicación tiene una mediación corporal y afectiva. Limitar la comunicación a la mera transmisión de datos y la intervención terapéutica a una simple administración de medios técnicos supone una reducción extrema de sus contenidos.
 
3.- Es necesario adquirir evidencia científica de la validez diagnóstica y terapéutica y comparar siempre su seguridad y eficacia con el modelo presencial antes de su implementación asistencial rutinaria.
 
4.- La consulta telemática puede ser un complemento asistencial o incluso sustituir, en ocasiones, a la consulta presencial, pero no debe automáticamente considerarse la misma cosa porque presenta sus propias características y limitaciones.
 
5.- Las responsabilidades éticas fundamentales de los médicos no cambian en la práctica de la telemedicina. La atención telemática toma como modelo asistencial la relación médico paciente, que es su eje vertebrador.
 
6.- El médico es el responsable de decidir en qué situaciones y en qué contextos se debe optar por una u otra forma de contacto e informar al paciente para que en todo momento puedan tomar conjuntamente las decisiones. Resulta contrario a los derechos y deberes de los médicos y a los derechos de los pacientes que se impida esta discrecionalidad por criterio clínico.
 
7.- Se debe poner especial atención para que las distintas formas de atención telemática estén debidamente integradas en los procesos asistenciales que les sirven de referencia y que el uso de estos sistemas no suponga un menoscabo de la calidad asistencial en aras de la productividad o incluso de los intereses económicos de nuevos agentes sanitarios alejados de los modelos originarios y la identidad de la medicina centrada la salud del paciente.
 
8. La atención telemática constituye un entorno asistencial nuevo que tiene su especificidad y algunos aspectos deben ser particularmente atendidos. Algunos de estos aspectos han sido tratados en este informe, como la brecha tecnológica que puede generar nuevos nichos de fragilidad o vulnerabilidad entre los pacientes o la quiebra de la confidencialidad y la privacidad que se abren en la utilización de medios telemáticos, pero otros deberán ser atendidos progresivamente según se vayan produciendo. En cualquier caso, la consulta telemática debe permanecer en el ámbito de decisión del médico y el paciente y guiada por el interés por su salud.
 
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Ya disponible en ICOMEM Media la jornada sobre las consideraciones éticas y deontológicas sobre la asistencia telemática a los pacientes AQUÍ
 
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