Dra. Luisa González, vicepresidenta del ICOMEM, y el Dr. Rafael del Río, presidente de la Comisión de Deontología, analizan el nuevo Código 2022

31 mar 2023

La vicepresidenta del ICOMEM y el presidente de la Comisión de Deontología del Colegio de Médicos, presentes en el acto de presentación del nuevo Código Deontológico en el Congreso de los Diputados, destacan algunas de las modificaciones de este documento marco para los profesionales de la medicina en la Comunidad de Madrid.

Dra. Luisa González, vicepresidenta del ICOMEM, y el Dr. Rafael del Río, presidente de la Comisión de Deontología, asisten a la presentación del nuevo Código de Deontología médica.
Dra. Luisa González, vicepresidenta del ICOMEM, y el Dr. Rafael del Río, presidente de la Comisión de Deontología, asisten a la presentación del nuevo Código de Deontología médica.
El nuevo Código Deontológico vuelve a defender uno de los principios básicos para los médicos: respetar la vida humana, la dignidad de la persona y el cuidado de la salud del individuo y de la comunidad son los deberes primordiales del médico.  
 
La Dra. Luisa González, vicepresidenta del ICOMEM, y el Dr. Rafael del Rio, presidente de la Comisión de Deontología del iCOMEM, coinciden en que "lo importante no es solo es tener un nuevo código sino hacerlo valer y defenderlo frente a normas biopolíticas que dominan la esfera pública e influyen en toda la población, pero que no siempre van en beneficio del paciente sino todo lo contrario”.
 
Con respecto al abordaje a la digitalización de la medicina, sus potenciales peligros y beneficios, el código recuerda los deberes de garantizar la identificación, preservar la intimidad y la confidencialidad, nunca manipular o utilizar información del paciente si no es necesario para su labor asistencial o investigadora. El Dr. Del Río destaca que “la telemedicina en ningún caso será sustitutiva de la relación presencial médico paciente sino complementaria”.
 
Un aspecto que está presente en el Código Deontológico trata de poner en valor el trabajo en equipo, abogando por una multidisciplinariedad que sea habitual y respetuosa, donde todos los médicos colaboren en el mejor bien del paciente. “Me gusta de manera particular este enfoque de hacer un trabajo colaborativo y desde el respeto dentro de la profesión”, puntualiza la Dra. González.
 
Otro punto del su articulado menciona que los facultativos tienen la obligación de respetar la autonomía del paciente, garantizando que la información les llega y la comprenden, adaptándose a sus capacidades. El consentimiento informado y la realización de una buena historia clínica son derechos del paciente que debemos proteger. “El consentimiento debe realizarse siempre y correctamente, excepto cuando haya riesgo para la salud pública o para la vida del paciente. Nos parece muy importante que el código remarque que en el caso de los menores será el médico quien decida si tiene la madurez suficiente para decidir sobre cuestiones que afectan a su salud a corto y largo plazo”, aclaran ambos.