Dra. Nieves Tarín Vicente: “El Consejo Científico del ICOMEM aporta seguridad en la información sobre temas de salud”

09 may 2019
Dra. Nieves Tarín Vicente: “El Consejo Científico del ICOMEM aporta seguridad en la información sobre temas de salud”

La Dra. Nieves Tarín Vicente es cardióloga y directora médica del Hospital Universitario de Móstoles. Además, ocupa el cargo de presidenta de la Sociedad Castellana de Cardiología y es miembro del Consejo Científico del Colegio de Médicos de Madrid. También es miembro del panel de expertos del Programa de Empresas Cardiosaludables de la Fundación Española de Cardiología en el Área de Salud Cardiovascular de la Mujer. Colabora con asociaciones de pacientes con problemas cardiológicos. Y, tiene numerosas publicaciones, proyectos y presentaciones sobre enfermedad cardiovascular.

  •  ¿Qué aporta a los médicos y a la población que exista un Consejo Científico en el Colegio de Médicos de Madrid?
Aporta seguridad en la información de salud recibida. En el caso de la población general, existe una demanda creciente de información sobre temas de salud, sin embargo muchas de estas noticias o novedades carecen de base científica y de consejo médico. Con la colaboración y participación de las sociedades científicas médicas madrileñas, se da respuesta o se descarta la veracidad de muchas noticias, y también se apoyan actividades docentes de calidad acreditadas para diferentes médicos especialistas. 
 
  • ¿Contribuye a que la institución colegial y las sociedades médicas trabajen de forma más coordinada?
Si claro, todos estamos representados. En su composición hay miembros de la Junta Directiva del ICOMEM, de las sociedades de especialidades del área médica, área quirúrgica y servicios centrales, de Atención Primaria y de la Universidad. Así se facilita los objetivos del Consejo Científico: asesorar a la Junta Directiva, examinar y proponer las actividades docentes que mejoren la formación y actualización de los médicos colegiados, así como potenciar la difusión de temas de salud e investigación. 
 
  • Además de las tareas que se han desarrollado hasta el momento ¿qué iniciativas sugeriría para que se lleven a cabo en el Consejo Científico?
Estaría bien promover encuestas entre los colegiados que identifiquen áreas de interés, posicionamiento o mejoras ante determinados problemas de salud planteados hoy en día. Y también aumentar los espacios de reflexión y debate a propósito del ejercicio de nuestra profesión (dilemas, optimización de procesos, liderazgo,…) además de compartir experiencias no sólo entre médicos, sino también con otras profesiones sanitarias y no sanitarias.
 
  • ¿Cómo valora que se fomente desde el ICOMEM la formación como un aspecto prioritario y sin patrocinios que puedan influir en los contenidos?
Es fundamental. Las acciones de formación dirigidas a médicos colegiados, mejoran nuestras competencias y facilitan la promoción profesional y el desarrollo personal, para que tengamos un ejercicio más cualificado facilitando la acreditación y el acceso a diferentes opciones laborales. 
 
  • ¿Ha evolucionado mucho la especialidad de Cardiología en los últimos años? 
La Sociedad Española de Cardiología cumple 75 años (1944-2019) y ha desarrollado el proyecto “el cardiólogo y la Cardiología del futuro” cuyo objetivo es analizar la situación actual de la asistencia y de la profesión cardiológica en España y plantear propuestas de un futuro próximo. El proyecto (https://secardiologia.es/images/institucional/cardiologo-cardiologia-futuro.pdf) incluye un análisis de la situación actual de la Cardiología en España (incluyendo aspectos demográficos, laborales, organizativos, tecnológicos y profesionales) y propuestas concretas sobre cinco aspectos que se han considerado de interés prioritario:
 
1. La asistencia cardiológica en el sistema público de salud.
2. La asistencia cardiológica en el sector privado.
3. Recertificación y reevaluación de competencias profesionales.
4. Formación y competencias del cardiólogo, y relación con especialidades afines.
5. Subespecialidades cardiológicas.
 
  • ¿En qué materias es necesario que se planteen actividades formativas para que los conocimientos de los cardiólogos se mantengan actualizados?
En primer lugar es muy importante formar en aspectos de desarrollo y aprendizaje en el ámbito de la Cardiología clínica, así como realizar actividades formativas relacionadas con otras especialidades como en Cardio-Onco-Hematología, y profundizar en las características del paciente crónico complejo en cuanto a comorbilidades y fragilidad. Y más específicamente, en materias como: arritmias, hemodinámica, imagen cardíaca (ecocardiografía avanzada, TAC cardiaco, resonancia magnética cardiaca), insuficiencia cardiaca y trasplante cardiaco, Cardiología Pediátrica, cuidados cardiacos agudos,  cardiopatías congénitas del adulto, y estimulación cardiaca.
 
  • ¿Cómo cree que sería una de las mejores maneras de adquirir esos conocimientos nuevos?
Combinando la formación presencial, la online y la práctica con casos y simuladores. De esta forma se conseguiría el reciclaje de muchos profesionales y una mejor formación cardiológica para médicos cardiólogos y no cardiólogos. 
 
  • ¿Es consciente la población de la importancia de mantener hábitos saludables para cuidar el corazón o es necesario seguir con las campañas de prevención y concienciación? 
No es consciente, aunque los mensajes son repetidos y difundidos por muchas vías. En los últimos datos publicados (www.ine.es), correspondiente a 2017 en España, las enfermedades cardiovasculares se mantienen como primera causa de muerte con un 28,8% del total (tasa de 263,2 fallecidos por cada 100.000 habitantes). Dentro del grupo de estas enfermedades del sistema cardiocirculatorio, la enfermedad isquémica del corazón (infarto, angina de pecho…), la cerebrovascular (ictus) y la insuficiencia cardiaca, son las más frecuentes. Aunque en su evolución incluyen aspectos biológicos, conductuales, culturales, sociales y económicos, se ha demostrado que las siguientes recomendaciones previenen y controlan la enfermedad:
 
-No fumar.
-Seguir un patrón de alimentación cardiosaludable: dieta mediterránea, baja en sal, grasas saturadas y azúcares añadidos. Sin olvidar frutas y verduras frescas, con pescados y aceite de oliva.
-Hacer ejercicio regular: 30 minutos diarios al menos. 
-Tener un correcto reposo nocturno y una hidratarse correcta con agua.
-Conocer y controlar las cifras de colesterol, glucosa, tensión y peso.
-Cumplir con los tratamientos médicos prescritos.
-Conocer los síntomas y signos de un ataque al corazón, de un ictus y de la insuficiencia cardiaca. 
-Y consultar siempre las dudas con los profesionales de la salud.
 
  • ¿Son las nuevas tecnologías y las redes sociales útiles como estrategia de difusión de mensajes de salud?
Son muy útiles, aunque requieren que las diferentes instituciones médicas y sanitarias avalen la información difundida, para que sea veraz y pertinente. Estas nuevas tecnologías pueden aumentar la velocidad de difusión de la información en salud.