Nuestro colegiado, el Dr. Jesús Mª López Arrieta, nuevo presidente de la SEMEG

12 jun 2007

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Jesús María López Arrieta ha tomado el testigo a Juan José Solano como presidente de la Sociedad Española de Medicina Geriátrica (SEMEG). Sus principales objetivos son optimizar la atención sanitaria al anciano con la creación de servicios de geriatría de manera homogénea en los hospitales de toda España, potenciar la especialidad a nivel docente y fomentar la investigación clínica y básica en torno al envejecimiento.



El doctor López Arrieta recuerda que los ancianos son la principal diana de los tratamientos, motivo por el que deberían estar incluidos en los ensayos clínicos. “La farmacocinética y farmacodinámica es diferente en ellos, igual que sucede con los niños”. Esto es así porque con los años va cambiando la composición corporal, la proporción de agua, grasas e hidratos en el organismo, y esto influye en la absorción de los fármacos. Además cambian los receptores celulares, lo que también provoca variaciones en las resistencias o las susceptibilidades a los medicamentos.

A esto se suma que los ancianos tienen varias enfermedades que se superponen y además están tomando varios fármacos que pueden interactuar. Por otro lado, López Arrieta recuerda que el organismo de los ancianos de hoy es diferente al de los futuros mayores puesto que han vivido muchos años en un ambiente muy diferente al actual, con menos prevención y más consumo de alcohol y tabaco. “Todo ello hace sospechar que los medicamentos funcionan de manera diferente en este colectivo que en la población adulta, y eso lo tenemos que tener en cuenta cuando se realizan ensayos clínicos farmacológicos”, dice.

Especialidad

Otro de los objetivos del nuevo presidente de la SEMEG es que la Geriatría tenga el mismo espacio en la carrera de Medicina que en el resto de especialidades. Estos especialistas reivindican el valor añadido que aportan en la asistencia al anciano al abordarlo de manera integral y tener en cuenta, más allá de la enfermedad puntual que están tratando, su capacidad funcional disminuida, que le hace muy vulnerable a sufrir otras patologías. “Puede suceder por ejemplo que una persona ingrese en un hospital por una neumonía y que durante su ingreso se encuentre luego con que no puede andar”, explica.

El geriatra trata de evitar esos efectos colaterales con el trato al paciente de manera integral para que el anciano conserve su autonomía y funcionalidad. En ese sentido, López Arrieta asegura que todavía en muchos sectores la patología del viejo como la pérdida de memoria o la incontinencia se consideran “normales”. “A veces se consideran propios de la vejez procesos que son reversibles”, cuenta.

En este marco, el presidente de la SEMEG lamenta que “aunque la Geriatría es una especialidad reconocida, la realidad es que no está desarrollada de forma homogénea en todas las comunidades autónomas. Hay hospitales que tienen equipos completos de Geriatría, en otros están integrados en equipos con otros profesionales y en algunos centros ni siquiera tienen presencia. Estaría satisfecho si al terminar mi mandato viese cómo en los programas de los diferentes partidos políticos y la administración se incluyese la Geriatría como una especialidad en todos sus aspectos, bien desarrollada”, concluye.